JULIETA MALACARNE
CUESTIÓN DE AMOR Y FE
De Neuquén a Catamarca por un compromiso espiritual
Julieta Malacarne tiene 19 años, nació en San Martín de los Andes y realizó sus estudios primarios y secundarios allí, después de mucho pensarlo su vida dió un giro, y vino a Catamarca en busca de una vida mejor y a vivir en una comunidad guiada por un maestro espiritual.
Radicada en la provincia hace dos años, vivió uno en la capital y luego se mudó a Miraflores donde esta mas cerca de su grupo místico. “Los considero como una familia, no hay uno a quien no conozca y valore, el hecho de estar en lo mismo hace que compartamos mucho tiempo, actividades y emociones”, expresó Julieta . “Estoy contenta con la decisión que tomé y tener un guía espiritual, persona en quien confió mucho”, agregó.
Al terminar la secundaria- indecisa entre las carreras-, eligió la de Comunicación Social y al respecto dice que es una carrera dinámica, que le viene bárbaro. “Ahora me encanta y me veo como periodista”, añadió.
La joven comentó que tiene muchas expectativas con la carrera para aprender a expresarse y estar segura a la hora de enfrentar un trabajo en el ámbito que sea y hacerlo bien; asegura que la gráfica es lo que mas le gusta, aunque aún tiene dudas.
“Con respecto a la carrera lo que hasta ahora vi me gustó y creo que todavía falta lo mejor”, manifestó.
“Mis compañeros son divertidos, es un grupo heterogéneo y ya hay gente a la que quiero mucho”, amplió.
En su futuro profesional le gustaría crear un proyecto particular, relacionado con el arte y la expresión. Aunque se siente cómoda en Catamarca, quiere viajar y seguir conociendo lugares.
“Por ahora estoy bien acá, pero la verdad es que no sé donde voy a elegir vivir dentro de un año”, concluyó.
Por Manuel Figueroa
Julieta Malacarne tiene 19 años, nació en San Martín de los Andes y realizó sus estudios primarios y secundarios allí, después de mucho pensarlo su vida dió un giro, y vino a Catamarca en busca de una vida mejor y a vivir en una comunidad guiada por un maestro espiritual.
Radicada en la provincia hace dos años, vivió uno en la capital y luego se mudó a Miraflores donde esta mas cerca de su grupo místico. “Los considero como una familia, no hay uno a quien no conozca y valore, el hecho de estar en lo mismo hace que compartamos mucho tiempo, actividades y emociones”, expresó Julieta . “Estoy contenta con la decisión que tomé y tener un guía espiritual, persona en quien confió mucho”, agregó.
Al terminar la secundaria- indecisa entre las carreras-, eligió la de Comunicación Social y al respecto dice que es una carrera dinámica, que le viene bárbaro. “Ahora me encanta y me veo como periodista”, añadió.
La joven comentó que tiene muchas expectativas con la carrera para aprender a expresarse y estar segura a la hora de enfrentar un trabajo en el ámbito que sea y hacerlo bien; asegura que la gráfica es lo que mas le gusta, aunque aún tiene dudas.
“Con respecto a la carrera lo que hasta ahora vi me gustó y creo que todavía falta lo mejor”, manifestó.
“Mis compañeros son divertidos, es un grupo heterogéneo y ya hay gente a la que quiero mucho”, amplió.
En su futuro profesional le gustaría crear un proyecto particular, relacionado con el arte y la expresión. Aunque se siente cómoda en Catamarca, quiere viajar y seguir conociendo lugares.
“Por ahora estoy bien acá, pero la verdad es que no sé donde voy a elegir vivir dentro de un año”, concluyó.
Por Manuel Figueroa
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